Estudiantes de química de A level enseñaron a alumnos/as de química de año 10 cómo separar diferentes componentes de disoluciones mediante el uso de cromatografía (para separar pigmentos de hojas) y destilación (para separar agua de sulfato de cobre). Así, los mayores desarrollaron habilidades de comunicación, y comprobaron que no hay nada mejor para aprender que enseñar, y los más jóvenes aprendieron de quienes ya lo hicieron antes. Fue una genial experiencia.